1. Presione el acelerador tan pronto como arranque.

Cuando el motor de la cargadora de ruedas recién se pone en marcha, la temperatura de la carrocería es baja, la viscosidad del aceite es alta y la fluidez es deficiente. El aceite no puede fluir suavemente a varios puntos de lubricación en un corto período de tiempo. Si se aumenta el acelerador en este momento, la velocidad del motor aumentará instantáneamente. Aunque el volumen de suministro de aceite y la presión de la bomba de aceite también aumentarán, el volumen de aceite lubricante y los requisitos de presión de aceite de cada par cinemático no se pueden cumplir instantáneamente, y el par cinemático no puede establecer un nivel estable. Una buena película de aceite lubricante produce una fricción seca instantánea, lo que provoca un desgaste severo. Si cada par móvil está mal lubricado, la resistencia al funcionamiento también aumentará. Si se golpea con fuerza el acelerador, el pistón, la biela y el cigüeñal impactarán violentamente, acelerando el daño a las piezas. Además, en el caso de los motores diésel equipados con turbocompresores, los sellos de aceite pueden dañarse fácilmente debido a una lubricación deficiente, lo que provoca fallas del turbocompresor y una reducción de la potencia del motor diésel. Por lo tanto, después de poner en marcha el cargador, debe funcionar de manera suave y a baja velocidad (aproximadamente 500-700 r/min), y está estrictamente prohibido aumentar demasiado el acelerador.

2. Reponer directamente el agua de refrigeración durante el funcionamiento.

La falta de agua de refrigeración hará que el motor diésel se sobrecaliente por falta de agua. La reposición directa de agua de refrigeración cuando un motor diésel está a alta temperatura provocará una gran diferencia de temperatura en todo el sistema de refrigeración, lo que hará que la culata, la camisa de cilindro, el bloque de cilindros, etc. se vuelvan quebradizos instantáneamente, causando microfisuras y filtrando gradualmente agua de refrigeración, lo que da como resultado fugas de aceite y gas. Por lo tanto, cuando la temperatura del motor diésel sea demasiado alta, debe funcionar sin carga a una velocidad ligeramente superior. Cuando la temperatura del agua baje a unos 50 °C, apague el motor, desenrosque la tapa del radiador, descargue el vapor de agua e inyecte lentamente agua de refrigeración.

3. Detenerse bajo carga o inmediatamente después de la operación.

Cuando la cargadora de ruedas se apaga bajo carga o inmediatamente después de la operación, el sistema de enfriamiento deja de funcionar inmediatamente y la capacidad de disipación de calor cae bruscamente. Una gran cantidad de calor generado por el trabajo se acumula cerca de la fuente de calor y no se puede disipar a tiempo, lo que hace que el agua de refrigeración de la culata, la camisa del cilindro, el bloque de cilindros y otras partes calentadas hierva, lo que hace que las partes de la máquina se sobrecalienten y se desgasten a altas temperaturas. Al mismo tiempo, el aceite del motor adherido a su superficie se deteriorará, lo que dificultará el arranque la próxima vez. Además, si un motor diésel con turbocompresor se detiene repentinamente, la temperatura del sobrealimentador aumentará a aproximadamente 600 ° C, lo que puede dañar fácilmente el anillo de sellado. Por lo tanto, la cargadora debe descargar la carga antes de apagarse y funcionar sin carga durante 3 a 5 minutos, de modo que la temperatura de la máquina baje por debajo de los 40 ° C y la temperatura del agua baje por debajo de los 50 ° C antes de poder apagarse.

4. No presione con fuerza el acelerador antes de detenerse.

Muchos conductores creen erróneamente que pisar el acelerador antes de parar puede dejar un exceso de diésel sin quemar en el cilindro para facilitar el siguiente arranque. De hecho, esto provocará una combustión incompleta, humo negro y un aumento de los depósitos de carbón; al mismo tiempo, pisar el acelerador a fondo varias veces aumentará repentinamente la fuerza de inercia de las piezas móviles, lo que agravará el desgaste de los pares móviles; en segundo lugar, el combustible sin quemar fluirá hacia la pared del cilindro. El cárter de aceite diluye el aceite del motor y acorta el ciclo de vida del aceite. Por lo tanto, la operación correcta es conducir suavemente a velocidades medias y bajas sin carga y luego parar.

5. Deslice hacia la pala durante el cambio.

Cuando la cargadora de ruedas está en funcionamiento, muchos conductores están acostumbrados a cambiar de marcha mientras aprovechan la inercia de la conducción a alta velocidad de la máquina hacia la pila de material. Después de desacelerar naturalmente, cambian de marcha y palan los materiales. El uso de la inercia de la conducción para precipitarse hacia la pila de material hará que toda la máquina se vea violentamente impactada, lo que provocará una tensión desigual en cada componente, lo que provocará daños en todo el cuerpo de la máquina. Esto hará que el cucharón, la pluma, el bastidor delantero, etc. se deformen y agrieten; la transmisión y el embrague se estresarán repentinamente, el par aumentará y las placas de fricción se deslizarán y deformarán fácilmente; los componentes de la transmisión también se dañarán fácilmente. La operación correcta es que la cargadora coloque la palanca de transmisión en una marcha baja antes de palear, avance hacia la pila de material a la velocidad II, inserte lentamente en la pila de material a la velocidad I y aumente gradualmente el acelerador para palear.